Ensalada de canónigos

Tres pasos, tan solo necesitamos tres pasos para elaborar esta sencillísima receta. Agosto es el mes de las vacaciones, del calor, de la desidia. Muchas veces vuelvo del trabajo y lo último que me apetece es cocinar. Por eso, las ensaladas son tan recurridas en esta época. Esta vez os traigo una preparada con canónigos.

Como os comentaba, a veces entre que salgo cansada del trabajo, el calor que te deja como más desganada e incluso el cansancio hacen que prepararte algo de comida sea una tarea demasiado laboriosa. Por eso, estos días suelo salir adelante con las ensaladas. 

Estas creaciones no solo refrescan o alimentan, sino que también me aportan más variedad. Hoy le echo esto, hoy la preparo con estos otros ingredientes, etc. En definitiva, platos más diversos, más dinámicos y más divertidos. Creo que debería inaugurar una sección de recetas express, donde las ensaladas tendrían el protagonismo total.

INGREDIENTES:

• Canónigos.

• Pimiento rojo.

• Melva.

• Vinagre balsámico al Pedro Ximénez.

• Aceite.

• Sal.

1º. Posamos sobre una fuente o plato la base de nuestra ensalada. En este caso los canónigos o también llamados berros. Esta vez no vamos a usar los elementos típicos de una ensalada como son la lechuga y el tomate, sino que nos vamos a dejar llevar por otros componentes.

2º. A continuación, vertemos los pimientos. En este caso, yo he optado por los pimientos enlatados o en recipientes de cristal. El que he usado es de estos últimos y viene aderezado con ajo. Escogí esta opción, porque los pimientos ya vienen cortados y a veces es muy cómodo. También podéis asarlos vosotros mismos, pero es una receta express, por ello nos ayudamos de estos ingredientes ya preparados. Después es el momento de la melva.

3º. Finalmente, aliñamos nuestra ensalada. Aparte del aceite y de la sal, yo he vertido sobre ella el vinagre balsámico al Pedro Ximénez. Este aliño me encanta, siempre que puedo es el que utilizo en las ensaladas. 

Como veis, este sería el resultado de la Ensalada de canónigos elaborada en tan solo tres pasos. Una receta express no solo para el verano, sino también para cualquier día que no tengamos ganas de cocinar.