Canapés de jamón serrano y alioli

Estamos en el puente de la Constitución y ya podemos observar como la Navidad va entrando en nuestras vidas. Así que ya es hora de que entre también en nuestras recetas y por supuesto, en este blog. Hoy os muestro cómo elaborar un entrante sencillo y rápido. ¿Qué os parece estos Canapés de jamón serrano y alioli?

En muchas casas, incluyendo la mía, estas fechas las usamos para poner el árbol de Navidad, el Belén y todos los adornos propios de esta festividad. Mientras, las ciudades se engalanan con el encendido de las luces. Sin duda, son unas fiestas que no pasan desapercibidas. Quizás por eso yo he querido hacer también mi pequeña aportación.

Conocí esta receta en una bar de Burgos al que acudo mucho. En él ponen unas tostas de jamón serrano con alioli, que siempre me pido porque están realmente deliciosas. Hace unas semanas, fui a cenar a casa de unas amigas y ellas emularon esta receta de tostas. Quedaron perfectas, tenían el mismo sabor y como era de esperar, les pregunté cómo las hicieron. Así que yo he hecho mi propia versión, solo que en vez de tostas, lo he elaborado para estas Navidades en canapé.

Además, con esta receta participo en el Reto de «Christmas Time» de la comunidad Cocineros del Mundo en G+. En él, aficionadas y aficionados a la gastronomía como yo, cocinaremos durante todo el mes de diciembre diferentes recetas relacionadas con las Navidad. 

INGREDIENTES:

• 5 lonchas de jamón serrano.

• 3 cucharadas de mayonesa.

• Una cucharada de aceite.

• Un chorrito de vinagre.

• Sal.

• Ajo en polvo.

1º. Cortamos el jamón en trocitos o si preferís, podéis comprarlo en tacos. En realidad, como os venga mejor y os sea más cómodo.

2º. Mezclamos el resto de los ingredientes con el jamón serrano hasta que quede una crema suave. Si al probarla, comprobáis que le hace falta un poco más de algún que otro ingrediente, agregad o modificad las cantidades a vuestro gusto. Tened en cuenta que lo que yo os recomiendo es según mi criterio, pero vosotros podéis tener otro. Por eso, probad y cambiad cuanto queráis.

3º. Finalmente ya solo nos queda combinarlo de la forma que más os guste. Puede ser con pan, con tostas, con biscotes e incluso con hojaldre.